Barrio Concordia
Uno de los primeros
pobladores de Vergara –inmigrante alemán- conocido como Juan Claussen, indudablemente previo al arribo del barco que lo trajo desde su natal Wesselburen (Alemania) debió llamarse Johann Claussen.
Fue propietario del Hotel Fraternidad.
Pero pocos lo conocen por
haber fundado en Vergara un barrio cuyo nombre nos es desconocido en nuestros días, llamado en 1914 CONCORDIA y que debido
al origen alemán de su creador, bien pudo haber sido nominado EINTRACHT
Esto ocurre 23 años después de la creación
del Caserio del Parao (llamado Vergara a partir de la ley de fundación en 1903), cuya fecha emblemáticas de nacimiento considero que es el 7 de abril de 1891, cuando se vende el primer terreno del fraccionamiento hecho por
el Agrimensor Manuel Coronel, por parte
del fundador Jose Fernandez Vergara a Bernardo Silvera;
Ese mismo dia le vende el solar a Claussen donde erigiría el hotel Fraternidad en la esquina de Artigas y Coronel bastante lejos del barrio referido.
Ese mismo dia le vende el solar a Claussen donde erigiría el hotel Fraternidad en la esquina de Artigas y Coronel bastante lejos del barrio referido.
UBICACIÓN
SURESTE- Bulevar Juan Antonio Lavalleja
SUROESTE Calle Fortunato Jara ,
NOROESTE calle Cebollati
NORESTE al calle José Gervasio Artigas
El terreno
donde se asienta el barrio fue adquirido por Juan Claussen al fundador Jose Vergara el dia 10 de junio de 1892 con fines de agricultura y pequeña explotación pecuaria.
Contaba con una superficie de 14 has 75 áreas 76 centiáreas
Los primeros pobladores del barrio
Ventas de
Juan Claussen
1914
Eustaquio Navarro
Avelino Freire
Secundino
Andrada
María J Caraballo
Pablo Aparicio
D Alvarez
Modesto Araujo
1915
Jeremías Rodríguez
Claudia Caraballo
Ramón Caraballo
Ramona Peña
Lino Lopez
Angel Lichi
Leonel Pereira
1919
Israel
Brun
Ventas Eulalia Pereira
1925
Petrona Fleitas
1926
Zoilo Brum
Teodoro Brum
Paula Brum
Nicanora Telésfora Olivera
Ines Merlo
Gabino Gonzalez
1928
Felipa M Pereira
Jorge Abraham
1932
Eulalia Pereira viuda de Juan Claussen, -radicada
en Montevideo calle Comercio 2008- vende
a Alfredo Arias Acevedeo –- casado con Rosa López Alfonso,
el área restante compuesto de 8 hectareas
Quien fue Juan Claussen
Inmigrante de origen alemán, recaló por estos pagos antes de culminar el
siglo en busca de mejores oportunidades y se inició como alambrador.
Más tarde
se casó con Eulalia Pereira, persona de
fortuna; hija y una de las tantas herederas de un fuerte estanciero de
Lavalleja.
Fue de los
compradores del primer día.
El 7 de abril de 1891, José Fernández Vergara le vende un terreno de 6650 metros;
el lugar donde construiría el hotel, pagando por el, la suma de 290 pesos.
Fue este
inmigrante una de las personalidades del pueblo.
Amigo personal del
fundador, colaboró con el
engrandecimiento del caserío.
El
22 de febrero de l907 empadronó en el
Concejo, un “Tilbury” de dos ruedas para
2 personas, y el 30 de noviembre de l908, una carreta.
En enero de l908, y fue aceptada la propuesta de Juan Claussen para establecer peaje del arroyo Parao
Nuevamente el
l5 de marzo de l909, resultó ser la propuesta de Claussen la mejor de l52 pesos
oro.
Tambien fue carnicero.
Era oriundo de
Wesselburen (Alemania); fueron sus padres Pedro y Margarita Claussen.
Cuando arribó a Vergara tenía 34 años y
permaneció aquí hasta su fallecimiento, ocurrido el 20 de noviembre de 1919 a
la edad de 63 años, hecho que provocó onda congoja.
HOTEL FRATERNIDAD
Fue su obra cumbre el HOTEL FRATERNIDAD . posta de diligencia- que albergó por años a las principales personalidades del departamento
Un incendio famoso
En l904,
el hotel funcionaba en las primeras
construcciones que el mismo Claussen levantara en el preciso lugar donde
hoy todavía existe la vieja casona.
Esas primeras poblaciones, que tenían solamente
frente de material y el resto extensos galpones de terrón y paja, fueron devoradas por un incendio en la
madrugada del 28 de marzo de l915.
Don Visitación
Ramos, en cumplimiento con sus tareas de
cochero de la estancia “Las Pampas”,
propiedad del gallego Isidro Tellechea, había venido a Vergara para llevar las provisiones del almacén de doña Belmiria Alves de Gigena que
estaba establecido donde hoy funciona el
Liceo y que ésta había comprado al propio Tellechea.
“Chiche” Ramos, esa noche pernoctaría en el
pueblo, para al día siguiente, muy
temprano, partir con rumbo de la
estancia llevando el surtido que le
habían encargado. La dueña de casa lo convido a pasar la noche en una de las
tantas habitaciones pero él rehuyó la invitación, porque el calor veraniego lo
sofocaba y prefería dormir debajo del carro. Entrada la
noche, tomó su poncho de paño, lo extendió en el suelo y luego de mirar
las pálidas luces que a unos cien metros
se tambaleaban en las ventanas del hotel, despuntó un
liviano sueño.
Por la
madrugada, a eso de la una de la mañana, despertó sobresaltado por unos gritos.
Se incorporó y observó sin dar crédito a
lo que veía; largas llamaradas abrazaban
las construcciones del hotel del
alemán. El fuego salía por las cuatro
ventanas que daban frente a la calle Artigas. Los vecinos acudían con todo tipo
de recipientes y el personal policial en pleno, al mando del capitán Germán
Muiño, intentaba por todos los medios sofocar el fuego. Luego de no poco
esfuerzo, se pudo aminorar la intensidad del siniestro evitando una pérdida
total.
Dice Ramos que
trascendió que el incendio había sido intencional, talvez por eso Don Juan y un allegado suyo, Francisco Rodríguez, fueron detenidos ese mismo día.
Se comentó que
el hotel estaba asegurado en 14.000 pesos
y que los peritos encontraron
entre los restos del siniestro un mechero. Y también se dijo que la
aseguradora restituyó solo la mitad del
monto.
En ese preciso
año se inició la construcción del nuevo edificio, culminando lo que es su actual estructura, en el correr
del año. Contaba con una instalación
lumínica alimentada a carburo. En uno de
los compartimentos del hotel había un
depósito con un tanque donde se alojaba el combustible y una red de
cañería lo distribuía por todas las habitaciones.
Es precisamente en 1914, comienza a vender los solares lo que le ayuda a solventar la construcción de la nueva estructura.
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